Los hijos de los fumadores tienen la tensión más alta
Los problemas cardiovasculares pueden originarse a muy temprana edad, incluso en niños de cuatro o cinco años, a causa del humo del tabaco. Así lo acaba de mostrar un estudio realizado en Alemania y en el que se ha tomado la tensión arterial a más de 4.200 escolares de educación primaria.
Aquellos cuyos padres fumaban -uno de los dos o ambos-, tenían más posibilidades de tener la presión sanguínea ligeramente más elevada, una circunstancia que podría arrastrarse hasta la edad adulta y, eventualmente, contribuir a la aparición de auténticos problemas asociados al sistema circulatorio, como ictus o infartos.
«El tabaquismo de los padres no sólo es perjudicial para el funcionamiento pulmonar de los niños, sino que representa un riesgo para su futura salud cardiovascular», en palabras de Giacomo Simonetti, principal autor del estudio desde la Universidad de Heidelberg (Alemania) y el hospital pediátrico de Berna (Suiza). «La prevención de enfermedades adultas como el infarto cerebral o el ataque al corazón comienza durante la infancia».
La investigación, publicada en la revista «Circulation»,
… y unos padres que no les quieren, o eso parece tras observar lo poco que se cortan en fumar delante de ellos (por no comentar nada de los que no fuman y les han metido en bares llenos de humo). Vaya paternidad responsable exhiben.